La Cámara de Diputados de Santiago del Estero, en una sesión de cinco horas, aprobó con amplio apoyo de legisladores de todas las bancadas la ley de promoción industrial, procurando atraer inversiones de capitales privados en industrias derivadas del sector turístico, agrícola, ganadero, forestal, minero y de la construcción, entre otros. La norma cuenta con amplio consenso en la opinión pública local, ya que es considerada una herramienta clave para la recuperación económica y social de la provincia.
Entre los aspectos que han merecido elogios de observadores y políticos se destaca la referencia explícita que formula ley hacia la actividad turística, a la que considera susceptible de resultar beneficiada por la promoción.
En esa materia, la ley establece la devolución de hasta un 30% de la inversión nueva realizada o de la ampliación de las existentes en un plazo que no podrá exceder los cinco años, contados efectivamente a partir de la primera producción efectuada, y el reintegro del 50% o crédito fiscal a los efectos de pagos futuros de impuestos por las inversiones en caminos, redes eléctricas, provisión de agua potable, desagües y otras obras de infraestructura.
También se eximirá a los inversores de pagar tributos provinciales por un plazo de 10 años, además de ofrecer facilidades para la compra, locación o comodato con opción de compra de bienes muebles e inmuebles del Estado provincial, mientras que habrá asistencia y asesoramiento técnico de organismos estatales en aspectos administrativos, tecnológicos y financieros. En cuanto a créditos y préstamos, la provincia subsidiará hasta el 50% de la tasa de interés de líneas crediticias, al igual que hará con el otorgamiento de préstamos de fomento de inversión.
Los dineros para reintegrar las inversiones de capitales privados saldrán de rentas generales y la provincia creará una cuenta especial que se denominará Fondo de Promoción y Desarrollo Industrial. Al respecto, el Ejecutivo provincial informará trimestralmente a la Legislatura acerca del Sistema Provincial de Promoción y Desarrollo Industrial, identificando los proyectos presentados y aprobados, sus titulares y el monto de los planes ofrecidos.
Ahora, resta la promulgación y reglamentación de la ley por parte del Ejecutivo santiagueño, lo que se descuenta ocurrirá de inmediato teniendo en cuenta la expectativa favorable que esta ley genera en el gobierno que encabeza Gerardo Zamora (foto), quien la considera una herramienta estratégica en las políticas de Estado.