Turismo Gastronómico
Martes 27 de Marzo de 2018
Turismo Gastronómico Martes 27 de Marzo de 2018
Sobre Turismo Gastronómico.
Las definiciones son variadas no obstante todas convergen en los mismos aspectos. A lo largo de los Foros que se realizaron durante el Plan CocinAR se pudo conformar esta definición:
Es aquel en el cual la gastronomía, como expresión histórica-cultural de los pueblos, motiva en mayor o menor medida el desplazamiento de turistas hacia los destinos con la finalidad de conocer el patrimonio cultural gastronómico material e inmaterial; consumir y disfrutar de productos, servicios y experiencias gastronómicas propias del lugar visitado, tales como:
Es un turista que participa de las nuevas tendencias del consumo cultural.
Es un viajero que busca la autenticidad de los lugares que visita a través de la gastronomía.
Que le preocupa el origen de los productos.
Que reconoce el valor de la gastronomía como medio de socialización, como espacio de convivencia, de intercambio de experiencias.
Tomando como base lo mencionado anteriormente podríamos esbozar el siguiente perfil:
Se trata de un turista que consume por encima de la media, que exige y valora, que rechaza la uniformidad.
Es un turista que busca experiencias honestas, reales y sobre todo experiencias locales. Busca conectarse con el entorno, con la cultura y las personas.
Por lo tanto, la gastronomía no puede convertirse en un producto anodino y anónimo, debe tener personalidad, porque si no se volverá un producto vulnerable, deslocalizado y adulterable.
La personas, el arma secreta.
En todo este contexto las personas tienen un rol primordial, son los grandes conectores que actúan como verdaderos embajadores del territorio, auténticos anfitriones que tienen una gran responsabilidad a la hora de trazar una estrategia orientada a este perfil de turistas.
No olvidemos, el Turismo Gastronómico es un elemento de preservación cultural.
Las definiciones son variadas no obstante todas convergen en los mismos aspectos. A lo largo de los Foros que se realizaron durante el Plan CocinAR se pudo conformar esta definición:
Es aquel en el cual la gastronomía, como expresión histórica-cultural de los pueblos, motiva en mayor o menor medida el desplazamiento de turistas hacia los destinos con la finalidad de conocer el patrimonio cultural gastronómico material e inmaterial; consumir y disfrutar de productos, servicios y experiencias gastronómicas propias del lugar visitado, tales como:
- Visita a bodegas.
- Comer en restaurantes que ofrecen especialidades regionales.
- Observar y participar de una demostración de cocina.
- Hacer degustaciones de productos típicos.
- Asistir a ferias, festivales vinculados a la gastronomía local.
- Visitar Museos y centro de interpretación de sabores.
- Recorrer circuitos o rutas turísticas, entre otros.
Es un turista que participa de las nuevas tendencias del consumo cultural.
Es un viajero que busca la autenticidad de los lugares que visita a través de la gastronomía.
Que le preocupa el origen de los productos.
Que reconoce el valor de la gastronomía como medio de socialización, como espacio de convivencia, de intercambio de experiencias.
Tomando como base lo mencionado anteriormente podríamos esbozar el siguiente perfil:
Se trata de un turista que consume por encima de la media, que exige y valora, que rechaza la uniformidad.
Es un turista que busca experiencias honestas, reales y sobre todo experiencias locales. Busca conectarse con el entorno, con la cultura y las personas.
Por lo tanto, la gastronomía no puede convertirse en un producto anodino y anónimo, debe tener personalidad, porque si no se volverá un producto vulnerable, deslocalizado y adulterable.
La personas, el arma secreta.
En todo este contexto las personas tienen un rol primordial, son los grandes conectores que actúan como verdaderos embajadores del territorio, auténticos anfitriones que tienen una gran responsabilidad a la hora de trazar una estrategia orientada a este perfil de turistas.
No olvidemos, el Turismo Gastronómico es un elemento de preservación cultural.
